agosto 2019 - Zendental

Apenas tenemos hueso debajo de pieza dental, ¿podemos realizarnos un implante?

Los implantes dentales se están convirtiendo en un tratamiento innovador y aceptado para reemplazar los dientes perdidos. En muchos casos, estos pueden ser preferibles a las alternativas convencionales de un puente o una dentadura postiza parcial. Sin embargo, crear y poner implantes requiere una evaluación y consideración cuidadosas, especialmente con respecto al hueso donde se pondrá el implante.

¿Pero es posible un implante dental sin masa ósea?

Para responder a esta pregunta debemos analizar varios factores que explicaremos a continuación.

¿Por qué preocuparse por los huesos?

Un implante dental es un poste de metal colocado en el hueso de la mandíbula. Este se usa como un ancla sobre el cual se coloca una corona (diente).

Cuando se coloca el implante, el objetivo es garantizar que sea completamente estable (osteointegrado) dentro del hueso, de modo que sea lo suficientemente fuerte como para sostener el diente sobre él.

Se debe tener mucho cuidado para garantizar que haya suficiente hueso alrededor del implante, ya que esto le proporciona al implante dental su resistencia y estabilidad.

Por lo tanto, una de las principales preocupaciones al colocar un implante dental es asegurar un volumen suficiente de hueso a su alrededor en altura, ancho y profundidad.

¿Cuánto hueso se necesita alrededor de un implante dental?

Como guía general, se requiere al menos 1 mm de hueso alrededor de un implante dental. Se requiere más espacio cuando el implante está al lado de un diente u otro implante (2 y 3 mm respectivamente). Si no hay suficiente hueso para envolver completamente el implante, se requerirá un injerto de hueso.

 

¿Cuánto hueso se necesita alrededor de un implante dental?

 

Al evaluar la altura del hueso, simplemente debe haber suficiente estructura ósea  para que el implante quede completamente sumergido. Sin embargo, es importante asegurarse de que el implante no sea tan profundo como para incidir en otras estructuras anatómicas (por ejemplo, el nervio en la mandíbula inferior o en los senos paranasales en la mandíbula superior).

Al colocar implantes en la mandíbula superior es posible que no haya suficiente espacio verticalmente y que se requiera una  elevación de senos paranasales para reconstruir el hueso.

Tipos de injertos óseos

Un injerto óseo es la adición de hueso, o material similar, a la estructura ósea, en un esfuerzo por aumentar el volumen en la mandíbula.

Por lo general, se coloca el hueso y se cura antes de que se pueda colocar el implante. El período de curación puede variar dependiendo del tipo de hueso utilizado.

Existen muchos tipos de injertos óseos, pero todos se dividen en estas categorías:

Autoinjerto: hueso utilizado del propio cuerpo del paciente.

Aloinjerto: hueso de un organismo genéticamente similar.

Xenoinjerto: hueso de un organismo genéticamente diferente.

Sintético: un material sintético biocompatible.

El tipo de injerto óseo que se elegirá dependerá de la situación y de la cantidad de hueso requerida.

Tiempo de injertos óseos

Dependiendo de la situación, los injertos óseos se pueden colocar al mismo tiempo que un implante o antes del implante. Si bien es más conveniente colocar el implante y el injerto al mismo tiempo (lo que ahorra tiempo de tratamiento), a veces la situación clínica no lo permite.

Si el injerto óseo debe colocarse antes de colocar  el implante, es muy importante seguir los plazos establecidos para el tratamiento. Si el implante se coloca demasiado pronto después de colocar el injerto, el injerto no habrá tenido tiempo suficiente para sanar y volverse sólido. En cambio, si el implante se coloca demasiado tiempo después de la colocación del injerto, puede producirse resorción y fusión del injerto con pérdida de volumen óseo.

Finalmente

Si tu caso es tener un implante dental sin hueso, no te preocupes, como explicamos anteriormente, hay distintas formas de aumentar tu estructura ósea y así poder recuperar tu salud dental.

La supervisión y vigilancia posteriores a la colocación de un implante dental

La supervisión de los implantes dentales es fundamental para lograr el éxito en este tipo de tratamientos. Un implante que no ha sido debidamente vigilado puede presentar anomalías que terminen por dañar el tratamiento. Así que es importante que el dentista vigile debidamente que todo con el implante dental vaya bien y en orden.

¿Cuáles son los problemas más comunes con los implantes dentales?

Son tres las clasificaciones más comunes para los problemas de implantes dentales. Cada una de esas clasificaciones corresponde a un tipo de problema, ya sea óseo, de tejidos blandos o mecánico. Es decir que cada clasificación corresponde a un tipo de tejido o elemento del implante. Cada uno de estos problemas con los implantes dentales, puede dividirse en otros tipos de problemas, por ejemplo, infecciones óseas o infecciones en los tejidos blandos. Problemas mecánicos con las distintas partes del implante.

Cada uno de estos problemas con los implantes tiene soluciones específicas, por eso es indispensable el detectar a tiempo cualquier anomalía con el implante dental.

Problemas con el tejido óseo

Es cuando se produce la pérdida de anclaje dental, es decir que el implante se desprende del hueso. Ya sea por un movimiento o por alguna infección o problema en la colocación del implante. Generalmente este tipo de problemas se notan poco después de la cirugía, por lo que su corrección suele ser rápida.

Problemas con el tejido blando

Son los problemas que afectan los tejidos blandos de la boca después de un implante dental, por ejemplo, las encías, la lengua las mejillas, etc. Pueden aparecer granulomas, aftas, infecciones o no cerrar las heridas o los puntos de sutura del colgajo.

Problemas mecánicos

Son los problemas propiamente del implante, es decir la fractura de la prótesis o el desprendimiento del mismo o de los tornillos con que se fija al hueso.

 

¿Cómo se soluciona un problema en un implante dental?

¿Cómo se soluciona un problema en un implante dental?

Esto depende siempre del tipo de problema que se tenga con respecto del implante dental, es decir que no hay un tratamiento único para todos los problemas. Por ello es indispensable la supervisión del implante dental.

La solución a los problemas óseos depende del problema que se tenga en el tejido óseo, por ejemplo, si se trata de una infección en el hueso, el tratamiento sería con antibióticos específicos para el tipo de infección. Si se trata de la pérdida de hueso dental, la solución dependerá del grado de desgaste y de la salud general del hueso. En la mayoría de los casos se puede reconstruir el hueso con tejido óseo de otras partes de la boca.

Generalmente , los problemas en los tejidos blandos son provocados por infecciones, por retraimiento de las encías y por fistulas. Las infecciones pueden aparecer en los tejidos poco después del implante, o producirse con el tiempo. Sobre todo, si no se tiene una buena higiene por parte de la persona, o por parte del dentista. La solución en estos casos depende del tipo de infección que se tenga. En el caso de las fístulas y heridas, a veces es necesario dar algunos puntos para cerrarlas o ayudar con medicamentos.

La solución a los problemas de tipo mecánico suele ser rápida y eficaz. Casi siempre se corrige al poco tiempo de notar cualquier anomalía. Por ejemplo, que los implantes están flojos, que se desprenden o que hay alguna quebradura.

¿Cuál es la importancia de la supervisión de un implante dental?

Es muy importante siempre tener un seguimiento de un profesional para evitar cualquier infección, trastorno o enfermedad dental después de un implante dental. Un buen mantenimiento del implante dental puede prevenir problemas más graves o incluso la pérdida del implante por alguno de los problemas ya citados.

¿Qué tipo de ortodoncia necesita una persona en edad juvenil?

Comer, beber y reír son actividades comunes para los humanos. Sin embargo, para algunos adolescentes que sufren problemas en los dientes y la boca esto puede convertirse en un verdadero desafío todos los días. Si es tu caso, afortunadamente aplicar la ortodoncia en edad juvenil es una ayuda muy valiosa.

La edad ideal para un tratamiento de ortodoncia

Los especialistas en la materia hablan de la edad entre 12 a 13 años como la más adecuada para determinar si es necesario un tratamiento de ortodoncia. La razón es sencilla: a esta edad, usualmente ya tenemos desarrollada la mayoría de los dientes y debemos cuidarlos toda la vida.

Hace algunas décadas se tenía la idea de que los tratamientos de este tipo eran incómodos y poco estéticos para la persona que los llevaba puestos. Pero, afortunadamente, los progresos en este campo han disminuido considerablemente el efecto de estos dos factores.

¿Qué tipo de ortodoncia se recomienda para los jóvenes?

El objetivo de un médico ortodoncista es implementar dispositivos correctores para las irregularidades dentarias que presentes como paciente. Algunos de estos sistemas correctivos son los siguientes:

Brackets metálicos

Son el tratamiento más convencional desde hace muchos años y lo más recomendado para preadolescentes y adolescentes. Su principal ventaja es que se manejan aparatos económicos y funcionales. El único punto débil de este sistema es la estética si no te gusta.

Tiene tres componentes principales:

El primero es el arco. Aplica fuerza o presión sobre los dientes a corregir.

El segundo es la liga o ligadura. Su función es unir el arco con el bracket y puede ser de goma o metálica.

El tercero es el bracket. Este indica la inclinación o giro que se le aplicará al diente para llevarlo a la posición adecuada.

El avance tecnológico ha mejorado la calidad y la estética de los materiales con los que se fabrican los brackets. Por ejemplo, recientemente han surgido los brackets de zafiro. Este material es transparente, resistente y suave, lo que te permitirá que el tratamiento sea más cómodo y cause una buena impresión a la vista.

 

¿Qué tipo de ortodoncia se recomienda para los jóvenes?

 

Brackets autoligados

Es uno de los tratamientos que equilibran adecuadamente la relación coste-beneficio. Con este sistema se mantiene el arco de metal dentro del bracket y, a la vez, permite que el diente tenga movimiento libre.

Su ventaja es que maneja un nivel bajo de fricción y fuerza en la dentadura, provocando así una corrección de los dientes en un ambiente más confortable para el paciente. Además, las incidencias de extracciones dentales necesarias son escasas y el tiempo que necesitas para completar el tratamiento resulta menor que el convencional.

Brackets de incógnito

En este tratamiento, los brackets son colocados en la parte interior de tu dentadura. Estéticamente es uno de los servicios más solicitados. Se utilizan brackets linguales más pequeños hechos a la medida de cada uno de tus dientes. Esto favorece una rápida y exacta eficiencia del tratamiento.

Ortodoncia invisible

También conocido como técnica de invisalign, en lugar de usar brackets se aplican fundas transparentes en la dentadura. De esta forma, la estética se convierte en el punto fuerte de este tratamiento. Usa alineadores transparentes que pueden quitarse en el momento que lo necesites.

Estos se fabrican a la medida usando tecnología 3D y deben renovarse cada dos semanas aproximadamente. Para que el tratamiento sea efectivo, tienes que asegurarte de llevarlo el mayor tiempo posible durante el día. Y al tratarse de fundas removibles, su limpieza puede realizarse en cualquier momento, favoreciendo la higiene dental.

En conclusión, cuanto antes mejor

El tiempo que inviertas en el proceso de un tratamiento de ortodoncia siempre dependerá de la gravedad de la afectación y la disciplina que asumas como paciente. Te recomendamos que antes de tomar una decisión, consultes con tu dentista.

El consumo de azúcar y su relación con nuestra salud bucal

El consumo de azúcar podría aumentar el riesgo de caries: azúcar y salud bucal, por tanto, se relacionan significativamente en nuestra salud bucodental.

Una investigación de médicos de Europa específicamente de Francia relacionó el consumo de un vaso de bebida azucarada con el aumento hasta un 22 por ciento de riesgo de cáncer de mamá. Pero el consumo de azúcar no solo afecta al cuerpo, sino que también hay que añadir los problemas bucales derivados de un consumo de dulces, especialmente en niños.

Azúcar, el aliado de las caries

Quienes se acercan a consultar el porqué de la presencia de caries, la respuesta que encuentran es que el consumo de los productos que contienen azúcar produce erosión y el desgaste del esmalte. De esta forma, las bacterias tendrán una mayor facilidad de causar daño y atacar al diente.

La caries son una de las enfermedades de origen infeccioso de mayor relevancia en el hombre y uno de los principales problemas de salud en el mundo y esto tiene que ver en su gran mayoría a factores de riesgo como el sociodemográfico, físico-ambientales, biológicos y económicos.

Según los odontólogos, el azúcar no es la principal causa de la caríes, lo que realmente la provoca es el ácido que es producido por el azúcar y es lo que genera la película que recubre los dientes y encías y puede crear un pequeño agujero en el esmalte dental.

El tiempo, factor clave

La cantidad de tiempo que los dientes están en contacto con el azúcar incidirá directamente en el daño que se pueda ocasionar. Aunque uno se cepille los dientes y utilice seda dental regularmente, no se puede alcanzar el origen de las caries, por eso se recomienda visitar al odontólogo, mínimo, cada 6 meses.

La formación de la caries se puede identificar cuando se observa una forma pequeña en áreas de desmineralización en la superficie del esmalte, pudiendo progresar a través de la dentina y llegar hasta la pulpa dental. Esto causa un gran dolor, que hace necesario asistir al consultorio inmediatamente.

 

Limpieza dental como medida preventiva

Limpieza dental como medida preventiva

Los odontólogos recomiendan a quienes tienen niños, ya que a la gran mayoría les gustan los dulces, llevar un cepillo portátil en todo momento. Así pueden cepillarles cuando se termina de consumir los dulces, los postres o algún alimento que contenga azúcar.

Otro de los problemas es que algunos padres de familia no revisan el cepillado de los niños, lo que también repercute en caries en los dientes temporales, que también hay que cuidar. Dependiendo del cuidado de los dientes de leche, salen los dientes definitivos.

En los padres de familia y en los cuidadores recae la responsabilidad, y por eso es importante que sean conscientes de que un buen cepillado y el constante uso de la seda dental puede evitar un tratamiento doloroso para los niños y costoso para el bolsillo.

Dieta sana, dientes sanos

La alimentación saludable también es importante; las frutas son una forma sana de alimentarse para satisfacer el antojo de comer algún dulce. La principal clave para evitar que los dientes tengan caríes, es evitar que la boca quede recubierta con azúcares y otros carbohidratos lo que permite  la formación de ácidos.

Los médicos constantemente llaman la atención a los padres de familia para que estén más atentos al cuidado de los dientes de los niños, en la mayoría de consultorios de 100 niños atendidos el 40 % tiene caries.

Las pautas alimentarias del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos invitan a limitar el consumo de refrescos que son una de las mayores fuentes de azúcar y aunque no se puede evitar todas las caries, sí se puede reducir las posibilidades de tenerlas mediante el cuidado oral apropiado y con pequeños cambios de dieta.

La caries dental, ¿tiene algo que ver con mis hábitos alimenticios?

Durante años los dentistas nos han aconsejado disminuir el consumo de azúcar al máximo debido a que estos pueden producir caries, de manera que hemos logrado evitar ser atacados por esta afección indeseable simplemente al eliminar este aditivo de nuestra dieta diaria. No obstante, nuevos estudios han descubierto que la caries dental y los hábitos alimenticios se encuentran relacionados. ¿Quieres saber qué otros alimentos evitar? ¡Te lo decimos a continuación!

La caries dental y tus hábitos alimenticios

Una dieta balanceada no solo es sumamente relevante para mantener nuestra salud general en óptimas condiciones, sino que también es de gran ayuda para la salud bucal. De no seguir una dieta correcta, se incrementan las posibilidades de desarrollar enfermedades en las encías y caries dental.

Esto aplica a cualquier etapa de nuestra vida y debe ponerse en práctica desde la infancia con la finalidad de prevenir molestias. De igual modo, la dieta también es fundamental durante el proceso de gestación, y la madre debe asegurarse de alimentarse adecuadamente para el correcto desarrollo de la dentadura de su pequeño.

Alimentos que hemos de evitar

Como hemos mencionado, el azúcar es la causa más común de caries dental, y aunque no es necesario eliminar todos los alimentos azucarados, sí es importante disminuir su ingesta.

No obstante, existe otro enemigo de nuestra dentadura: los carbohidratos. Todas las comidas que contengan carbohidratos fermentables pueden ayudar en la aparición de caries. Por lo que es imprescindible prestar mucha atención a nuestro consumo de dulces, pastas, patatas fritas, pan e incluso algunas frutas, ya que estos pueden iniciar un proceso de desmineralización perjudicial para nuestros dientes.

 

La caries dental y tus hábitos alimenticios

 

Algunos consejos

  • No olvides limitar el consumo de bebidas con mucha azúcar, especialmente los refrescos.
  • Evita a toda costa los alimentos que puedan pegarse a tus dientes, ya que esto produce un incremento en la placa bacteriana. Un ejemplo de esto lo encontramos en las galletas, los pastelillos y las papas fritas, ya que por su composición suelen durar más tiempo entre los dientes y las muelas,
  • Incrementa la ingesta de leche, yogur natural y algunos alimentos ricos en fibra, como pueden ser el brócoli, el pescado, las coles de Bruselas y los frutos secos.
  • Consume alimentos ricos en vitamina B y hierro, ya que son un gran aliado para la preservación de la salud de nuestras encías.

Alimentos que debemos consumir

  • Gomas de mascar sin azúcar.  Aunque pueda resultar extraño, se recomienda consumir goma de mascar después de las comidas, puesto que ayudan a eliminar los ácidos que dañan el esmalte de los dientes. Solo asegúrate de que sea sin azúcar o conseguiremos el efecto contrario. Algunas gomas poseen xilitol, un elemento que se ha demostrado, cuenta con cualidades preventivas de caries al inhibir el desarrollo de srteptococus mutans, la bacteria causante de la caries dental.
  • Incrementar el consumo de frutas y verduras, especialmente aquellas que contienen fibra y estimulan el desarrollo de saliva, la cual es una defensa totalmente natural en contra de las caries. También debes optar por frutas y verduras que sean frescas y no tan dulces, tales como las manzanas, el apio y las zanahorias.
  • Nunca dejes de lado los productos lácteos. Los alimentos como el queso, la leche, el yogur, etcétera, tienen alto contenido de calcio y vitamina D; elementos de suma importancia para los dientes, que están constituidos principalmente de calcio. Sin mencionar que el calcio se mezcla con la placa y se adhiere a la dentadura, de manera que crea una película que los protege de los terribles ácidos que provocan caries y ayudan a restaurar su esmalte natural.

Conclusión

Como has visto, la alimentación está íntimamente ligada a la salud bucal, de manera que no olvides estos consejos para prevenir cualquier tipo de problema.

¿Cuál es la relación entre el sarro en nuestra boca y la halitosis?

Cuando se habla de mal aliento pocos reflexionan sobre la relación entre el sarro de la boca y la halitosis. El mal aliento se debe a la presencia de múltiples bacterias que quedan entre los dientes si no limpias de manera correcta tu dentadura con hilo dental. Esas bacterias liberan componentes de azufre, lo que se percibe como mal olor.

¿Sufres halitosis y no sabes por qué?

Si sufres de halitosis, debes tratarlo cuanto antes. Aunque se trata de un problema de hábito personal, por no saber cómo cepillarte o ignorar sus causas, el impacto es social. Generalmente las personas rechazan a quienes tienen mal aliento. Esto en ocasiones puede contribuir a una baja autoestima y hacerte sentir inseguro. De acuerdo a revistas especializadas, la halitosis la sufren 7 de cada 10 personas. Además, el 90 % de los casos que se originan en la cavidad bucal no son producto de problemas estomacales como mucha gente cree.

Respecto a los hábitos alimenticios, hay algunos particulares, como el ingerir cebolla o ajo, que contribuyen a que el mal aliento sea más potente, lo mismo que el hábito de fumar. Quienes fuman contribuyen en demasía a la creación de sarro en lengua y dientes. Otras causas que contribuyen a la presencia de halitosis, además de poca higiene, es la presencia de implantes y caries mal atendidos.

Hay muchos mitos que se han creado en torno al mal aliento. Uno de ellos es que el enjuague bucal lo elimina, cuando solo lo hace de manera temporal. Debe tomarse en cuenta que la presencia de halitosis sirve como una señal de otros problemas bucales, por ejemplo, la inflamación de las encías. Desde cierto punto de vista, la halitosis desempeña una función positiva al ponernos en alerta de otras patologías.

No basta con lavarte los dientes, también debes cepillarte la lengua y utilizar hilo dental. Una vez identificadas las diversas causas de la halitosis y después de haber desvanecido los mitos que se han creado al respecto, lo único que puedes hacer si la padeces es combatirla de manera cotidiana a través de un puñado de acciones muy concretas.

 

Cinco pasos para evitar el sarro en los dientes

Cinco pasos para evitar el sarro en los dientes

Si no tenemos una adecuada higiene bucal, los residuos de comida pueden causar placa dental, la cual es muy común, pero si no se remueve mediante el cepillado, al acumularse y endurecerse se convierte en sarro.

1. Utiliza hilo dental. Con el uso correcto podrás remover partículas de comida así como la placa que se incrusta en lugares difíciles de alcanzar y que puede transformarse en sarro.

2. Lava tus dientes con pasta dental que contenga fluoruro. Este ingrediente es indispensable para que puedas proteger tus dientes del deterioro cotidiano.

3. Cepilla tus dientes dos veces al día. La limpieza bucal siempre será tu aliado para eliminar cualquier residuo extra. Por ello es necesario que laves tus dientes dos veces al día durante al menos dos minutos en cada ocasión. De esta manera, podrás remover la placa dental y por lo tanto, el sarro.

4. Usa enjuague bucal. Con sus agentes antibacteriales, el enjuague te ayudará a disminuir la acumulación de sarro en las encías.

5. Si no es posible evitar los alimentos y bebidas azucaradas lo que sí debes hacer es esmerarte un poco más en la limpieza bucal cuando los ingieres. El azúcar es un pésimo aliado en cuanto a mantener una adecuada higiene bucal, ya que nutre las bacterias que causan el sarro, deteriorando la dentadura.

Conclusión

La limpieza bucal es importante para no padecer halitosis y otro tipo de patologías como la inflamación de las encías. Sigue los consejos anteriormente mencionados y tendrás una salud bucal óptima.

Ortodoncia para adultos, ¿Cuál es la más utilizada?

Si ya no eres un niño, no debes hacer lo que dicen los demás, ya puedes tomar tus propias decisiones y, si tu caso es que debes tomar una decisión para utilizar ortodoncia para adultos, sabemos que escogerás lo más estético. Sin embargo, te mostraremos todas las opciones que tienes:

¿Qué tipo de ortodoncia te conviene?

En la actualidad existen muchos tipos de brackets para ortodoncia, están los de metal, que existen desde siempre, hasta los cerámicos que ya prácticamente no se ven y pasan desapercibidos en nuestra boca.

Los brackets solo son el soporte que va unido al diente y dónde se coloca el arco de metal que alineará los dientes durante el procedimiento. Ya que van ubicados en los dientes, sus modelos se han mejorado para que puedan ser lucidos de acuerdo a cada persona.

1. Brackets metálicos

Son los más utilizados, son los tradicionales y menos costosos. Si lo único que quieres es corregir tu sonrisa o alinear los dientes que no pudiste arreglar cuando eras niño y, además, no eres de los que se estresa por la estética, puedes usarlos.

Corrigen cualquier problema de manera eficaz y solo se notarán porque por ser metálicos, el color resaltará en tu dentadura. Hay varios tipos de brackets metálicos:

Acero: son los que comúnmente se utilizan y difícilmente producen alergia así que pueden ser colocados en la mayoría de las personas.

Mini: se fabrican del mismo material que los brackets anteriores, pero como su nombre indica son más pequeños que los convencionales, en concreto pueden llegar a ser hasta un 30% más pequeños. No cambian su función, solo el impacto visual es menor.

Titanio: son utilizados cuando el paciente presenta alergia a los convencionales de acero. Tienen la misma función y trabajan exactamente igual, la única diferencia es que son un poco más costosos.

2. Brackets de zafiro

Como hay personas que prefieren un tratamiento odontológico que los ayude con su estética se fabrican brackets de zafiro. La función es la misma que los metálicos, sin embargo, como el zafiro es una piedra transparente son muy solicitados cuando el paciente no quiere que su dentadura lleve un tratamiento metálico.

Al ser transparentes prácticamente no se ven cuando una persona habla, por lo que proporcionan discreción. Generalmente las llaman ortodoncias estéticas.

¿Ortodoncias autoligables o con ligas?

Luego de definir el tipo de bracket que vas a utilizar debes tomar otra decisión que también está afectada por la estética: si los aparatos serán autoligables o les colocarás ligas individuales.

1. Autoligables

No requieren ligas individuales para sostener el arco al soporte del diente, son brackets que tienen una pestaña que sube y baja para agarrar el arco, esta pestaña viene en los mismos brackets, no debe agregarse nada y cumplirá la misma función.

Este tipo de ortodoncia se encuentra en metálico y no metálico, así que son diferentes formas de llevar la ortodoncia.

2. Convencionales

Son los que necesitan una pequeña liga para que ajuste el arco al soporte del diente. Si tu ortodoncia es metálica y no es tan importante para ti que se vea o no en tu boca, puedes usar ligas de colores para darle un toque diferente.

Y tú, ¿qué clase de ortodoncia prefieres?

Si eres de los que escogió ortodoncia no metálica para que no se notara en tu sonrisa, debes elegir ligas de colores claros, para seguir disimulando el tratamiento, existen blancas, beige y transparentes, así que igualmente pasarán desapercibidas.

Cualquier método que utilices y cualquier tipo de ligado que escojas, funcionará perfectamente si escoges un buen ortodoncista registrado en el Colegio de Odontólogos.

Fases de un implante dental, lo que tengo que saber antes del tratamiento.

Un implante dental es una excelente opción a la hora de reponer o sustituir dientes que se han perdido por cualquier causa. Estos implantes dentales están fabricados en titanio puro, lo que permite que tenga la capacidad de adaptarse al resto de tejidos presentes en la boca.

¿Cómo se coloca un implante dental?

El proceso puede dividirse en una serie de etapas muy fáciles de seguir.

1. Fase de diagnóstico y planificación

La primera de las fases de un implante dental consiste en realizar un diagnóstico apoyándose en herramientas y ayudas diagnósticas. Para este caso en particular se realiza una radiografía panorámica. Esta imagen permitirá evaluar las estructuras óseas del paciente y sus características anatómicas cercanas a la zona de intervención.

2. Fase de intervención quirúrgica

En esta segunda fase comienza la cirugía que permitirá insertar el implante en el lecho óseo. Este proceso comienza con la administración de anestesia local para evitar la sensación de dolor en el paciente. Posteriormente el profesional de la salud oral a cargo del procedimiento realizará una incisión en la encía hasta acceder al hueso donde se insertará el implante.

Para insertar el implante el odontólogo deberá realizar la intervención en el hueso mediante un fresado, luego se insertará el implante. Finalmente, después de la colocación del implante en el hueso, se procede a realizar una sutura y dar por terminada la cirugía.

Es importante que después de la cirugía el paciente esté atento a las recomendaciones e instrucciones que le brindará el profesional de la salud oral que esté a su cargo. Estas recomendaciones son básicamente de tipo farmacológico, es decir, se le recetará al paciente un tratamiento con medicamentos para aliviar el dolor y también se le darán instrucciones claras sobre los cuidados que debe tener con la zona intervenida.

Antes de dar inicio a la siguiente fase, es necesario retirar la sutura entre 8 y 12 días posteriores a la intervención quirúrgica. Después se debe esperar un periodo que oscila entre 2 y 3 meses, durante este tiempo el implante y el hueso se ajustaran sujetándose fijamente.

 

La mejor solución para los problemas de tu boca

 

3. Fase de diseño y confección de prótesis dental

Esta es la fase final del proceso y comienza con la toma de medidas específicas de cada paciente. Estas medidas son enviadas a un laboratorio que produce la pieza dental que se adecue perfectamente a las medidas y necesidades de cada paciente en particular.

Finalmente, el odontólogo colocará la pieza dental personalizada ajustándola a el implante que se insertó en la fase quirúrgica, este implante actúa como una raíz artificial para esta nueva pieza dental.

4. Fase de revisión

Es importante que después de todo el proceso de diseño e implantación de una prótesis dental, se realicen controles periódicos y visitar a los profesionales de la salud oral como debemos hacerlo regularmente todas las personas.

Estas revisiones periódicas permiten prever posibles complicaciones o infecciones que pueden presentarse por un manejo inadecuado. Además, es posible detectar el desgaste y deterioro normal que se genera en las piezas dentales debido al uso.

La mejor solución para los problemas de tu boca

Podemos evidenciar que los implantes dentales son una gran oportunidad para las personas que han perdido una o más de sus piezas dentales. Son una solución segura, fácil, permanente y que está al alcance de todos, gracias a que están elaborados en un material que no genera ninguna reacción adversa para el organismo de las personas.

Es de gran importancia que, al momento de realizarse un procedimiento quirúrgico de este tipo, se cerciore de que el lugar y los profesionales con los cuales se va a someter al tratamiento estén calificados y autorizados para realizar dicho procedimiento.